MADRID, ESPAÑA. – El Real Madrid selló su título de Liga española número 34 en la noche del jueves. La victoria 2-1 sobre el Villareal hizo que su ventaja en la cumbre fuera matemáticamente indiscutible, a falta de una jornada por disputar.
Previo al partido disputado en el Estadio Alfredo Di Stefano, la Casa Blanca sólo requería sumar un punto para destronar al Barcelona; pero dos goles por parte de Karim Benzema aseguraron por partida doble que el trofeo liguero regresara al Santiago Bernabéu por primera vez en tres años.
Como es de imaginarse, las celebraciones sobre el césped del Di Stefano (cancha de entrenamientos merengue donde se disputan los partidos del Madrid en condición de local, mientras se somete al Bernabéu a un proceso de remodelación) fueron triunfantes, con el capitán blanco Sergio Ramos liderando los vítores.
La dupla de jugadores belga conformada por Eden Hazard y el portero Thibaut Cortois se mostraron igualmente efusivos, divirtiéndose en los momentos de euforia.
Sin embargo, todos pudieron ver cómo un miembro particular de la plantilla de Zinedine Zidane no se mostraba tan exultante como el resto.
De hecho, Gareth Bale (quien no participó en los cinco compromisos más recientes del Madrid) mostraba el aspecto característico de un hombre que no había tenido la oportunidad de conocer al resto de sus compañeros y se preguntaba por qué tanto alboroto.
Para dar cierta perspectiva, hasta el Barça, eterno rival del Madrid, tuvo el gesto de felicitar a los pupilos de Zidane por sus éxitos; aunque podemos decir, casi con toda certeza, que lo hicieron a regañadientes.
A propósito de Zidane, este título de Liga sólo consolida aún más sus logros destacables como técnico del club merengue.
El título de Liga española 2019-20 representa el trofeo número 11 alcanzado por el entrenador francés en apenas 209 partidos a cargo de la plantilla blanca, lo que representa un promedio de un palmarés por cada 19 partidos aproximadamente.
Independientemente de cómo se plasme, tres Champions League y dos títulos de Liga en tres temporadas completas al mando del plantel madridista es un historial verdaderamente formidable.
Sin embargo, el mejor momento de la noche (y el más próximo a nosotros) vino por parte del mediocampista Toni Kroos, quien brindo por el campeonato, con una cena de victoria digna de un rey.
espn