MADRID, ESPAÑA. – Iker Casillas comunicó el martes al Consejo Superior de Deportes del Gobierno de España su intención de presentarse a las elecciones de la Real Federacion Española de Fútbol. El ex capitán y leyenda de la selección española debería de hacer pública su decisión inicial en las próximas fechas para retirarse del fútbol y centrarse en la campaña electoral.
Los rumores comenzaron a salir las pasadas Navidades, cuando el entorno de Casillas tanteó la posibilidad de ser presidente a través de varios pesos pesados del fútbol español, que vieron la posibilidad con buenos ojos. A partir de ahí, Iker hizo un trabajo de planificación de riesgos con sus asesores para recabar un primer esbozo de los apoyos con los que podría contar si, finalmente, el todavía actual portero del Porto se presentaba a las elecciones.
Hace un par de semanas, Iker Casillas y su equipo de trabajo se reunieron con la nueva presidenta del CSD en España, Irene Lozano, para trasmitirle una posibilidad que, ayer, según fuentes de la operación confirmaron a ESPN, fructificó a falta de oficialidad.
Llegados a este punto, ¿cuáles son los miedos y las ventajas de la carrera por la presidencia del fútbol español para Iker Casillas? A su favor, al menos a priori, estarían los apoyos de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y de La Liga. Ambos estamentos están claramente enfrentados al actual presidente de la RFEF, Luis Rubiales, y, aunque no desean airear su apoyo públicamente en un principio, parece que podrían ser aliados del portero en su guerra contra la Federación. Otro de los puntos a favor del portero es su postura de conciliador para buscar una paz entre las distintas instituciones del fútbol en España donde, actualmente, el panorama es desolador con continuas guerras públicas.
Sin embargo, en su contra, Iker tendrá varios puntos. Empezando por la fecha de las elecciones. Inicialmente, Iker tenía previsto presentarse para las elecciones de 2024, aunque decidió adelantar los plazos por el pesimismo de los doctores del Porto para continuar su carrera futbolística. Precisamente por esa inmediatez, Luis Rubiales querría adelantar las elecciones a la RFEF a antes de la Eurocopa para limitar a Casillas el tiempo de recolección de votos en las provincias españolas donde, por cierto, Rubiales tiene mucha fuerza.
Con todo esto encima de la mesa, y con la confirmación inicial de que Iker Casillas quiere acudir a las elecciones salvo que todo se tuerza a última hora, parece que el futuro de la presidencia de la RFEF va a estar movido en los próximos meses. Falta la confirmación pública que, en teoría, y una vez arreglada su retirada del fútbol con el Porto, debería de ser oficial en las próximas fechas.
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